Comienza con un niño enfermo (con gripe, suponemos) que es visitado por su abuelo, un señor pesado que no hace más que pellizcarle en la mejilla. Pero el yayo viene a contarle un cuento y ahí, nos sumergimos en la historia de esta princesa y su amor verdadero... Sin olvidarnos de las (geniales) interrupciones del niño, que no quiere "historias de besos".
Mítico |
Recuerdo haberla visto varias veces cuando era una niña y que, a pesar de no acordarme mucho de ella actualmente, me flipó en su momento.
Y ahora, revisionada con una edad, me sigue pareciendo una pasada.
Tiene la magia del cine de los 80, ese que ya no volverá. Es graciosa, ágil, entretenida y con personajes secundarios memorables (hasta el prota es majo). También cuenta con diálogos que han marcado a una generación (Íñigo Montoya tiene un grupo de Facebok con su frase estrella). ¡Lo tiene todo!
Lo único malo: que la princesa del título, Buttercup
100% recomendada a nuestro niño interior. Y a los adultos, también ;D.
Yo era muy fan de pequeña T__T y me sigue gustando mucho <3 no me acordaba casi pero hace días la volví a ver (y hoy, en pocas semanas dos veces xDDD).
ResponderEliminarSin duda la de los Brady lo parte más, y es así, eh? XDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDD.
Totalmente, es una maravilla. Calla, calla con lo de los Brady... Pesadillas voy a tener, XDDDDDD.
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